martes, 22 de febrero de 2011


LA EXTRAÑA PASAJERA





Intro.

Hay una persona maravillosa detrás de ese rostro tímido. Hay un ser gritando en silencio detrás de esa apariencia temerosa. Hay cantidades de palabras que se pierden en el viento cuando tus labios están cerrados. Y llorar en silencio. ¿De qué han servido todos estos años con tus ojos cerrados y tu cabeza abajo? ¿De qué ha servido ocultar tu nombre de todos los personajes que te rodean? ¿Cuándo has podido reconocerte en un espejo dentro de todos estos años de melancolía? Existe alguien con tu rostro y con otros movimientos y puedes conocer a esa persona ahora. Tú ahora. Solamente tú. Como si sintieras por primera vez tus propias caricias.





Cuerpo.

La Extraña Pasajera es un drama de 1942 dirigido por Irving Rapper y protagonizado por Bette Davis. Como muchos de los dramas que Davis ha interpretado en su carrera, la película es un medio para las cualidades interpretativas de la actriz americana que toma control de su personaje y lo despliega a niveles magistrales. Para 1942, Bette Davis había no solamente hecho la transición del teatro al cine sino que se había ganado el clamor del público y la crítica por su interpretación en Cautivo del Deseo (1934). A partir de allí, Bette Davis se convertiría en una actriz talentosa y una mujer de carácter, enfrentándose a los estudios por sus derechos, un acto sin precedentes en el cine. En los años treinta, Davis ganaría dos premios Oscar y tendría muchos éxitos de taquillas convirtiéndose así en una de las actrices favoritas de Hollywood.






Para el papel de La Extraña Pasajera, Davis tuvo que sobrepasar a Irene Dunne, Norma Shearer y Ginger Rogers. Cuando a Davis le interesaba un papel buscaba todas las formas posibles para llegar a una mejor interpretación. Desde la lectura de la novela original hasta la elección de cierta parte de la vestimenta, Bette Davis buscó llenar cada uno de los detalles para hacer un trabajo sumamente realista. Davis normalmente aceptaba papeles que involucraban sacrificios en cuanto a alterar su belleza física en pantalla. Cualquier papel que buscara retar sus cualidades era tomado como un desafío personal y Davis trabaja a partir de ello. Su labor sería recompensada con una nominación al Oscar, aunque no llegaría a ganar la estatuilla.



La Extraña Pasajera es un drama muy típico de Hollywood. Una estrella indiscutible como Davis, un reparto a la altura con Paul Henreid y Claude Rains como sus coprotagonistas cercanos y con roles secundarios de muy buena medida, con Gladys Cooper, también nominada, a la cabeza. Así tenemos también en este drama ejemplar un alto nivel de vestuario, escenografía y cada detalle importante. La cinematografía correría a cargo de Sol Polito y la música a cargo de Max Steiner. El director Irving Rapper ya había trabajado previamente con Davis y su asociación con ella permitiría a la actriz americana a tener cierto control sobre la producción, como muchas veces se entendía en esa época sobre sus películas, eran “películas de Bette Davis”. Esto no quita mérito al director ni al grupo sino demuestra un envolvimiento crucial de Davis para colaborar en muchas aspectos de la película. La Extraña Pasajera quedaría como un drama admirado por público y crítica, dejándonos con uno de los momentos más románticos en el mundo del cine.




Datos. 


Título Original: Now, Voyager 
Dirección: Irving Rapper 
Año: 1942 
País: Estados Unidos 
Intérpretes: Bette Davis, Paul Henreid, Claude Rains, Gladys Cooper, Ilka Chase, Bonita Granville, John Loder, Lee Patrick, James Rennie, Mary Wickes 
Duración: 117 min.

jueves, 17 de febrero de 2011


LA HUELLA DEL RECUERDO




Intro.

La niña no recuerda las manos cerradas. El niño no recuerda su libertad. Cuando el tiempo y viento soplan a través de los años todo queda cristalizado en nuestra mente y por algún error de la naturaleza un incidente en nuestra vida vuelve con todas esas fuerzas desconocidas. Intentar reaccionar o razonar es colocarse en una posición que no podemos imitar. Reacciones tardías, juicios desesperados, arrepentimiento. Todo ello nos espera cuando nos encontremos en el lugar designado por el destino, en una jaula de vidrio contemplando la oscuridad.






Cuerpo.

Establecido como uno de los géneros más representativos en Estados Unidos, el film noir comenzó su época en los años cuarenta. Para 1946, varias joyas del género habían proclamado la apertura de este movimiento. El Halcón Maltés de 1941 fue uno de los primeros en contar con un reconocimiento total por parte de crítica y público, siguiéndole ejemplos de similar calidad como Perdición, Laura, Tener y no Tener, La Mujer del Cuadro, todas de 1944. Esta tendencia no solamente sería de los grandes estudios. Producciones de poco costo empezarían a aparecer por diferentes productoras, sumando así un número interesante del género. Estas producciones no tendrían tanto apego pero en algunos casos el tiempo ha sido generoso y se han transformado en películas de culto tanto por su trama original como por las futuras estrellas que formarían parte de dichas producciones.







Los estudios RKO fueron desde sus comienzos uno de los más grandes estudios de Hollywood, apoyados en su gran negocio de los musicales, sobretodo aquellos de Fred Astaire y Ginger Rogers. Muchas estrellas comenzarían en RKO y algunos de las películas más importantes del séptimo arte como King Kong y El Ciudadano Kane serían creadas allí. Los cambios de mando en los estudios generarían diversas políticas en cuanto a sus intenciones y taquillas llegando a ser una de las cinco más grandes compañías de Hollywood decayendo a mediados de los cuarenta en una productora de películas B. Es así como se harían populares las películas de terror bajo el mando del productor Val Lewton y también los diversos film noir producidos con bajo costo pero que se convertirían en los pilares de todo el género. Para 1948 el magnate Howard Hughes tomaría control de RKO y sus constantes divergencias en cuanto a los diferentes proyectos llevarían a la compañía a la deriva siendo comprada a mediados de los cincuenta y posteriormente cerrada en 1957.








La Huella del Recuerdo es un film noir de la RKO que cuenta con el atractivo de un joven Robert Mitchum, predestinado a convertirse en un icono del film noir y en uno de los actores más grandes de Hollywood. El guión parte de Sheridan Gibney basándose en Lo que Nancy Quería de Norma Barzman. La compleja historia estaba apoyada en una de las características del film noir: el flashback. No tan apreciada en su época debido a su inusual presentación, La Huella del Recuerdo se ha transformado en un clásico del film noir apoyado en sus drásticos climax y en el uso del flashback en inusuales proporciones haciendo de esta una película muy peculiar. Como buen ejemplo de este tipo de películas todos los flashbacks nos preparan paulatinamente a un desenlace revelador, satisfaciendo la calidad de una película de bajo presupuesto cuya mayor virtud es la osadía de su guión interpretado correctamente por Mitchum y compañía.









Datos. 


Título Original: The Locket 
Dirección: John Brahm 
Año: 1946 
País: Estados Unidos 
Intérpretes: Laraine Day, Brian Aherne, Robert Mitchum, Gene Raymond, Sharyn Moffett, Ricardo Cortez 
Duración: 85 min.


sábado, 12 de febrero de 2011


EL ESQUELETO DE LA SEÑORA MORALES


Intro.

Un momento de tranquilidad al llegar a tu hogar. Las preocupaciones del mundo desaparecen al traspasar una puerta. La calidez de un lugar conocido hace de ti un hombre diferente, una persona que puede perdonar todas las injurias y descansar… hasta el comienzo de otro nuevo día. Ese hogar es el único espacio que ahuyenta la locura lejos de la mente de un hombre. Es así como el hogar, ese antaño núcleo de la sociedad, se materializa como cada uno de nuestros sueños de niño y se erige como uno de los más importantes templos de nuestra tranquilidad y sabiduría.




Cuerpo.

El Esqueleto de la Señora Morales es uno de los más destacados ejemplos del cine mexicano y es calificada como la única película de humor negro producida en este país. Dicha designación podría estar asociada con lo atípico de la temática dentro del cine mexicano y por una notoria influencia de Luis Buñuel sobre el guionista Luis Alcoriza, quien visualiza uno de esos tantos personajes obsesivos y enfermizos que se pueden vislumbrar en la filmografía del director español. Alcoriza, colaborador de Buñuel en varias películas, se basó en el cuento El Misterio Islington de Arthur Machen y junto a su director Rogelio A. González empezaron a imprimir la atmósfera de lo que se convertiría una película de tintes originales apoyados tanto en el guión, en la dirección y en las interpretaciones.





Rogelio A. González fue uno de los grandes directores de la época dorada del cine en México, teniendo en los años cincuenta y sesenta su mejor período. Su asociación con el actor y cantante Pedro Infante los llevarían a diferentes proyectos de mucho éxito. Su carrera está íntimamente ligada con todo el concepto del cine y el teatro, teniendo una gran afición por ambos y desarrollándose tanto como actor, guionista y director. Para el momento de El Esqueleto de la Señora Morales, González ya había alcanzado diversos palmares dentro de su país y este éxito le permitirían adentrarse a campos más singulares, como es el de este caso.



Uno de los grandes aportes al cine mexicano es la capacidad actoral de Arturo de Córdova. De gran valor escénico, el actor mexicano hizo algunas películas en Estados Unidos, de las cuales destaca Por Quien Doblan las Campanas (1943), y después haría carrera en México donde brindaría actuaciones memorables, convirtiéndose en un símbolo de su generación. Dirigido por los más grandes directores de su país, de Córdova actuaría en más de cien películas dejando un legado importante y una presencia inigualable. Al igual que su personaje en El Esqueleto de la Señora Morales, su actuación en Él de Luis Buñuel asemeja parecidos interesantes, pero demostrando en su actuación la diferencia entre el drama y la sátira. Estas dos podrían colocarse como sus actuaciones más destacadas dentro de su amplio cuerpo de trabajo.


Datos.

Título Original: El Esqueleto de la Señora Morales
Dirección: Rogelio A. González
Año: 1960
País: México
Intérpretes: Arturo de Córdova, Amparo Rivelles, Antonio Bravo, Angelines Fernández, Luis Aragón, Guillermo Orea, Rosenda Monteros, Elda Peralta, Mercedes Pascual, Paz Villegas, Roberto Meyer, Jorge Mondragón, Armando Arriola
Duración: 92 min.

sábado, 5 de febrero de 2011


AL MORIR LA NOCHE





Intro.

Al caer la noche muchas historias crecen y viven dentro de nuestro imaginario emocional. Como si fuera el dictamen de nuestra conciencia, una historia en una noche puede cambiar toda nuestra concepción del mundo y así, es posible penetrar un contexto en el cual no podemos controlar la lógica. Oh, los mundos imaginarios y nuestras personas pierden su capacidad para discernir, entender y concentrarse en una respuesta racional… el más grande error de nuestras vidas. Solamente hay que dejarnos llevar por la corriente y cualquiera sea nuestro destino, inclusive uno fatal, debemos mantenerlos en nuestros brazos… en silencio.




Cuerpo.

Dentro del cine, la colaboración entre diferentes directores de un mismo país o una misma corriente era vista como algo original y debido al poco número de dichas realizaciones eran en su mayoría de gran aceptación del público, logrando así una buena taquilla. La fórmula de este tipo de películas se basa en la creación de capítulos por parte de cada director y la historia se ve entrelazada por el hilo narrativo o por una temática en común, en muchos casos presentada en una especie de prólogo. La asociación de directores se veía reforzada por un número grande de artistas, creando así un mayor atractivo. Dentro de esta categoría podemos destacar Boccaccio 70 (1961) dirigida por Mario Monicelli, Federico Fellini, Luchino Visconti y Vittorio de Sica; La Conquista del Oeste (1962) dirigida por John Ford, Henry Hathaway y George Marshall; Ro.Go.Pa.G (1963) dirigida por Jean-Luc Godard, Ugo Gregoretti, Pier Paolo Pasolini, Roberto Rossellini; Historias Extraordinarias (1968) dirigida por Federico Fellini, Louis Malle y Roger Vadim, entre otras.








Al Morir la Noche es una producción de los estudios británicos Ealing, populares en los años cuarenta y cincuenta por sus comedias ácidas y de humor negro. Los más representativos directores de Ealing (Cavalcanti, Crichton, Dearden, Hamer) estuvieron a cargo de este compendio de terror, una producción inusual para los estudios pero muy buen ejecutada y popular entre el público. Alberto Cavalcanti, brasileño de nacimiento, se mudó a Francia durante la etapa del cine mudo creando importantes colaboraciones entre las que destacan L’Inhumaine de Marcel L’Herbier e inclusive en la producción alemana Berlín, Sinfonía de una Gran Ciudad de Walter Ruttman. Se unió a Ealing en los cuarenta. Charles Crichton fue un director británico salido de los mismos estudios, al igual que Basil Dearden y Robert Hamer. Estos tres últimos tendrían gloria en sus labores individuales creando la identidad de Ealing, encabezada por su sagaz productor Michael Bacon.



Michael Balcon fue productor de cine desde comienzos de los años veinte, siendo parte de pequeños triunfos y dándole a un joven Alfred Hitchcock sus primeros trabajos como director. En 1938 asumiría el rol de productor en Ealing y sería uno de los momentos más fructíferos del cine británico, ya que el productor junto a un hábil equipo de escritores, directores y actores logró crear una identidad a la compañía en donde las costumbres inglesas eran referencias primarias en sus trabajos y en donde la denuncia social mantenía un tono discreto a la vez que poderoso. Este podría considerarse como uno de los primeros períodos de identidad británica frente al mundo del cine, en donde un estudio cambió la manera de crear a partir de una iniciativa propia y de riesgos controversiales. Balcon y sus años en Ealing fueron aquellos que le dieron notoriedad a los estudios y las obras de esa época son considerados clásicos debido al énfasis en las costumbres y tendencias británicas de la época hábilmente presentadas por todo su equipo.





Al Morir la Noche está repleto de actores ingleses cuya carrera recién comenzaba y que serían en posteriores años figuras conocidas del séptimo arte. Entre ellas destaca la presencia de Michael Redgrave, un actor con bastante recorrido para ese tiempo y cuyas mejores performances lo convertirían posteriormente en uno de los más grandes actores británicos de su tiempo. También destacan Googie Withers, Mervyn Johns, Sally Ann Howes, entre otros. La película ha quedado como un clásico del horror debido a su influencia en posteriores entregas del género en el Reino Unido. Su fórmula de misterio sin demasiado uso de efectos especiales y con destacadas actuaciones inclusive en roles secundarios, permite la creación de una atmósfera necesaria para incrementar la paranoia y las desviaciones de algunos de sus personajes. La película, y puntualmente escenas específicas en cuanto al diálogo, el uso de la cámara y la iluminación, son ahora parte del imaginario popular y de la tradición inglesa con respecto a las películas de horror.








Datos.

Título Original: Dead of Night
Dirección: Alberto Cavalcanti, Charles Crichton, Basil Dearden, Robert Hamer
Año: 1945
País: Reino Unido
Intérpretes: Michael Redgrave, Mervyn Johns, Frederick Valk, Roland Culver, Googie Withers, Anthony Baird, Renée Gadd, Sally Ann Howes, Barbara Leake, Mary Merrall, Basil Radford, Robert Wyndham, Judy Kelly, Michael Allan, Ralph Michael
Duración: 102 min.

martes, 1 de febrero de 2011


ASFALTO



Intro.

En la calle todos los rostros aparecen sin nombres ni distinciones. Podrías volver el rostro un millón de veces y aún así no podrías identificar los problemas que recorren la mente de todo ser humano… menos aún sus enfermedades. Cuando la calle es parte de tu vida inspeccionar cada rostro y cada par de ojos es una labor innecesaria. Recordar todo aquello para lo que fuiste entrenado, distinguir entre todo aquello que aún estás aprendiendo, limitar todas tus respuestas a simples actos… es una labor que se vuelve una rutina y una rutina que nubla tu mente cuando crees que eres parte de todo ese mundo. Ahora alguien se está acercando. Rápido, alguien se acerca para preguntarte tu nombre. Y sabes. Sabes que no tienes nombre ni distinción.




 
Cuerpo.

Asfalto es una de las últimas producciones mudas realizadas en Alemania y la película más famosa del director Joe May. May, original de Austria, se convertiría en uno de los pioneros dentro del cine mudo alemán siendo su trabajo vital para un desarrollo periódico, pero opacado por las obras de maestros como Fritz Lang, F.W. Murnau o G.W. Pabst, entre otros. Su cuerpo de trabajo en esta época y su asociación con otras estrellas del cine mudo alemán le permitirían emigrar a Estados Unidos y a Universal Pictures, donde lamentablemente quedaría instalado en películas B, no logrando reeditar anteriores logros, menos aún Asfalto.

 



Asfalto es parte del expresionismo alemán, movimiento muy celebrado y reconocido como uno de los grandes momentos del cine mundial. Su colaboración e influencia durante los años cuarenta y cincuenta es notable. Su mayor reconocimiento en futuras generaciones ha hecho de estas películas un verdadero estudio y una retrospectiva importante que se mantiene en diferentes festivales y aniversarios alrededor del globo. Siendo una de las últimas de su generación y sin contar con la constancia de un director de diversas obras (a diferencia de otros como Lang o Murnau), Asfalto es un importante triunfo en solitario que magnifica el trabajo de May como un director de similares habilidades a sus pares.





Asfalto es un drama calculado donde el director May se apoya en el expresionismo. Hecho en la UFA (Universum Film Aktiengesellschaft), el estudio más importante de Alemania en ese tiempo, May se apoyaría el aspecto técnico con colaboradores que ya habían trabajado anteriormente en las películas más importantes del expresionismo. Así, tenemos a Erich Kettelhut como creador de la escenografía, junto a Robert Herlth y Walter Röhrig. En la cinematografía encontramos la habilidad de Gûnther Rittau, el genio de la cámara en Metropolis. El drama propuesto en Asfalto es una historia de amor y la tragedia humana frente a los valores, una suerte de crisis de identidad que en el cine mudo alemán puede verse ejemplificado a través de varias películas del género como Fausto, El Último Hombre o Amanecer. Estos dramas cobran fuerza gracias a la genialidad de cada uno de sus directores, haciendo extrañar en cierta medida mayores exponentes del caso por parte de May. Al mismo tiempo es un placer presenciar una de las joyas que cierra un período tan rico en el cine alemán, que posteriormente tendría una efímera pero interesante etapa hablada, cortada y transformada en una interrogante debido a Hitler y a la guerra. El esplendor del cine alemán no volvería a cobrar nunca la fuerza del cine mudo, aunque un despertar en los años setenta con el Nuevo Cine Alemán erigiría una vez más esa capacidad creadora única de dicho país.





Datos.

Título Original: Asphalt
Dirección: Joe May
Año: 1929
País: Alemania
Intérpretes: Gustav Fröhlich, Else Heller, Albert Steinruck, Betty Amann, Hans Adalbert Schlettow
Duración: 94 min.