sábado, 27 de junio de 2009


NÁUFRAGOS




Intro. 

Un grupo de náufragos se mantienen en vida en un bote. No hay aparentes esperanzas de sobrevivir. Y afuera de su micro universo se encuentra la amenaza de guerra. ¿Cómo tratar de luchar si la misma lucha nos condena a un destino de constantes lágrimas? Y aunque el dilema parece bastante difícil es más aún improbable creer que se puede filmar una película con nueve personajes dentro de un bote durante aproximadamente una hora y media. ¿Qué hacer ante el miedo de un agresor? ¿Cómo filmar cuando todas las dificultades están de tu lado? No lo sé, observen a Hitchcock. 






Cuerpo.

Cuando Inglaterra le declaró la guerra a Alemania, Hitchcock buscó de diversas formas hacer una película al respecto. Para ello se documentó sobre la sobrevivencia de aquellos cuyos barcos eran atacados. Hitchcock tomó el libro homónimo de John Steinbeck y así empezó el planteamiento de una obra única. Tomando en cuenta todas las dificultades y aún asociado con David O. Zelnick y Twentieth Century Fox, Hitchcock decidió tomar el riesgo. Toda la película sería filmada en estudio y se emplearían cuatro botes, algunos eran cortados en la mitad para así hacer mejor uso de las tomas. A ello se le sumó las enfermedades. Tallulah Bankhead, la actriz principal, tuvo neumonía dos veces, varios actores con resfríos y hasta un accidente que terminó en dos costillas rotas. Varios actores y técnicos fueron cambiados por estos problemas. Aún así el proyecto siguió y Hitchcock culminó su película. En un inicio la película fue muy exitosa, pero críticas posteriores y la falta de apoyo de Zelnick hicieron de esta una obra casi olvidada. Los problemas surgieron cuando algunos críticos se centraron en el personaje alemán, creyendo que la película se asemejaba a propaganda nazi. Steinbeck no quiso desprestigiarse culpando al estudio de los cambios. Bankhead insultó a los críticos que hicieron las insinuaciones. Ante tantas idas y venidas, Zelnick decidió retirar su apoyo y la película no tuvo una distribución internacional provocando que su circulación culminara rápidamente.







Náufragos fue la película más famosa de la mayoría de sus estrellas. Para Tallulah Bankhead, reconocida dama del teatro y de la farándula, esta fue su película más memorable. Hitchcock tomo en cuenta ello reconociéndole su labor a pesar de las dificultades en la filmación debido a su extravagante personalidad. Perjudicado por los mencionados problemas de distribución, Hitchcock no volvió a filmar con la Twentieth Century Fox y la película fue más reconocida por los problemas en su entorno. Náufragos es un buen ejemplo de destreza y de habilidad de cámara para mantener un ritmo intrigante cuando solamente se dispone de un solo lugar y de un número masivo de personajes para un bote. Sin duda una película difícil desde casi todos los aspectos, críticos modernos la han reconocido como un brillante manejo de su director siendo una película que enseña perfectamente como confrontar el problema de hacer cine.





Datos. 


Título Original: Lifeboat 
Dirección: Alfred Hitchcock 
Año: 1944 
País: Estados Unidos 
Intérpretes: Tallulah Bankhead, William Bendix, Walter Slezak, Mary Anderson, John Hodiak, Henry Hull, Heather Angel, Hume Cronyn, Canada Lee 
Duración: 96 min.


jueves, 25 de junio de 2009


STALAG 17






Intro.

Ser un prisionero de guerra tenía un solo valor durante la Segunda Guerra Mundial: escaparse. Pero la línea entre el drama y la comedia no parece estar definida por tan importante evento histórico. Estamos ante la más clara demostración de cinismo. Total cinismo. Aún así, la consigna del escape mantiene viva la esperanza de extraños personajes encerrados en la barraca 17. Para nuestra suerte toda esta locura se encuentra encabezada por William Holden. E inclusive tenemos un pequeño homenaje a Betty Grable. Disfruten en sus asientos.





Cuerpo.

Una visión muy personal de la guerra nos propone la lucha de prisioneros de guerra contra los alemanes. Escrita para el teatro por dos ex reclusos de guerra, nos encontramos ante una visión cínica y fría de la misma. Alternando la comedia con el drama, Billy Wilder hace gala de su conocida versatilidad como director y una vez más nos propone un clásico, esta vez en el género de guerra. El rol principal recaía en Holden, quien viendo al personaje demasiado cínico, se negó a ser parte de la película. Kirk Douglas y Charlton Heston fueron considerados pero al final la compañía obligó a Holden a tomar el rol a pesar de su negativa. Al final, William Holden ganaría el Oscar como mejor actor.








Stalag 17 está considerada como una de las películas de guerra más importante de su tiempo, ganando muy buena recepción tanto de público como de la crítica. La película tiene un ritmo apacible que va ganando mucha forma mientras se desarrolla la intriga. A esto se le agrega lo caricaturesco tanto en americanos como alemanes, quienes son personajes de valores inamovibles recordándonos así la cruel situación que se nos presenta. Wilder como director controla bien este tema y lo ha demostrado durante su carrera con entregas como Con Faldas y a lo Loco (1959), El Apartamento (1960) o Irma la Dulce (1963), por nombrar algunas. En estas comedias nos encontramos ante realidades crudas de la vida como es el sexo casual, la prostitución, el asesinato o el genocidio. Wilder propone la comedia a partir de la parodia o la ridiculización de ciertos aspectos, y ello lo contrasta con la tragedia que ensombrece toda la obra. En el caso de Stalag 17, el director nos propone penetrar uno de los momentos más trágicos de la historia de la humanidad haciéndonos sonreír de cuando en cuando, como si su tarea fuera volver cínico al espectador.









Datos.

Título Original: Stalag 17
Dirección: Billy Wilder
Año: 1953
País: Estados Unidos
Intérpretes: William Holden, Don Taylor, Otto Preminger, Robert Strauss, Peter Graves, Neville Brand, Harvey Lembeck, Sig Ruman, Richard Erdman
Duración: 120 min.


sábado, 20 de junio de 2009


LA CAÍDA DE LA CASA USHER






Intro.

Un ánima en sufrimiento a través de las letras de Edgar Allan Poe. Un recorrido en un lugar condenado al sufrimiento. Los retoques del surrealismo a provecho de la delineación del terror. El silencio como el mejor medio para expresar aquello que desconocemos, para expresar todo aquello que no sabemos gritar.








Cuerpo.

Jean Epstein fue el escritor, productor y director de La Caída de la Casa Usher basándose levemente en el cuento de Poe y tomando entre sus asistentes a un joven Luis Buñuel. Desde sus comienzos en 1922, Epstein, director polaco nacido en 1897, decidió hacer sus propias películas teniendo control absoluto sobre las mismas. Inspirado por sus colegas franceses, sobretodo Abel Gance (cuya esposa es la actriz en La Caída de la Casa Usher), y por el expresionismo alemán, Epstein es considerado un director experimental que permitió el desarrollo de las técnicas del surrealismo en el cine. Epstein era en sí un intelectual del cine dejando también en su legado diferentes publicaciones sobre el séptimo arte.






La Caída de la Casa Usher es su obra más reconocida demostrando su gran admiración por los alemanes y sobretodo, por El Gabinete del Doctor Caligari de Robert Wiene estrenada en 1920. Epstein busca someter la visión a partir de la suma de todos los componentes en una asfixiante atmósfera de terror. La escenografía, la música, el juego de cámaras, uso de sombras, sobreposición de imágenes y todo aquello que es parte de la película es pensado por Epstein para sumar a un fin en común. En realidad, Epstein quería lograr el efecto que Poe provocaba en sus libros y se basó no solo en La Casa Usher sino también utilizó diferentes partes de otros relatos como El Corazón Delator y La Caja Oblonga. El resultado fue una de las películas más visionarias de su tiempo siendo aclamada desde su estreno y convirtiendo se en un pilar para futuras películas influenciadas por el terror y el surrealismo.






Datos.

Título Original: La Chute de la Maison Usher
Dirección: Jean Epstein
Año: 1928
País: Francia
Intérpretes: Marguerite Gance, Jean Debucourt, Charles Lamy
Duración: 63 min.

jueves, 18 de junio de 2009



LARGA JORNADA DE LA NOCHE 





Intro.

La familia es la base de la sociedad. Una familia. Un padre. Una madre. Dos hijos. Alcoholismo. Avaricia. Locura. Drogadicción. Enfermedad. Años y años siendo parte de esta unidad y todo aquello que puede olerse es el oculto drama de todos los días y la constante pregunta, ¿hasta cuándo? Una familia imitando una familia. Una familia sin cesar en ser parte de una unidad para la sociedad.








Cuerpo.

Un drama de cortes teatrales. La obra de Sidney Lumet configura un universo cerrado en donde cuatro personajes parodian con la idea de ser una familia cuando en realidad son una herida abierta gangrenándose. Dentro de este conjunto encontramos cuatro actuaciones de renombre. Katharine Hepburn, la inmortal Katharine Hepburn, con un enorme andar entre el cine y el teatro y cuyas actuaciones parecen reducir al mínimo la dificultad de ser actriz. A su lado, Ralph Richardson, un señor del teatro con incursiones precisas en el cine resaltando así toda su capacidad histriónica. Ambos mantienen la tónica pesimista y asfixiante de la película. Junto a ellos dos actores de bastante experiencia. Jason Robards que alternaba teatro y cine en esos momentos, y que aún le esperarían roles mucho más memorables. Dean Stockwell, un joven cuya experiencia con el cine lo conoce desde su niñez debutando a sus diez años. En el festival de Cannes de 1962 estos cuatro actores serían premiados por sus actuaciones. Hepburn también sería nominada a un Oscar.






Larga Jornada hacia la Noche fue un drama teatral de cuatro actos escrito por Eugene O’Neill debutando en 1956. Debido a ello, O’Neill ganaría al año siguiente el Pulitzer, siendo considerada su obra maestra. La obra se basa en una familia de 1912 y su confrontación con muchos de los problemas que los agobian. Los cuatro personajes principales presentan sus carencias, debilidades y vicios en una paleta de miserias compartidas. Ninguno de ellos pretende alterar su situación y menos aún alterar la situación de los demás proponiendo así una estructura del caos, haciendo del drama y de la tragedia en la atmósfera reconocida de su hogar.







Nos encontramos básicamente ante una película que rescata mucho del teatro y que busca  provocar dicho sentido. El reparto en sí está hablando de actores de carácter quienes proponen ser parte de la atmósfera del lugar. Sus tiempos, coordinaciones y su gran ensamblaje entre ellos mismos, nos permite ver una obra interesante y asfixiante, tal y como requiere la obra. Además, estamos hablando de un drama en todo el sentido de la palabra, en donde la desconfiguración de la realidad demuestra cuan patéticos y afectados son los personajes y cuanto intenta mantener su propia farsa para poder vivir en familia.









Datos.

Título Original: Long Day’s Journey into Night
Dirección: Sidney Lumet
Año: 1962
País: Estados Unidos
Intérpretes: Katharine Hepburn, Ralph Richardson, Jason Robards, Dean Stockwell, Jeanne Barr
Duración: 174 min.

sábado, 13 de junio de 2009



UNA MUJER PARA DOS




Intro.

Un objeto de deseo en la figura de una delgada blonda. Dos artistas comprometidos con la manera de expresar sus capacidades y a la vez, la manera de mantenerse en su vida bohemia. Tres personas envueltas en una trama de seducción y compromiso. ¿Cómo sobrevivir bajo la idea moral y romántica de tres personas? La respuesta puede ser tomada entre pinzas, y también puede ser tomada bajo un solo toque: el toque Lubitsch.






Cuerpo.

Una mujer. Dos hombres. Basado en la obra teatral de Noël Coward y con guión de Ben Hecht, la historia de un trío amoroso se desentiende de la obra original y mantiene la línea de comedias amorosas tan particulares de Lubitsch. La comedia propone diversos y sublimes sentidos en cuanto a la sexualidad, logrando ser de gran popularidad en su momento. Para el año siguiente, se instaló el código Hays sobre la moralidad dentro del cine. Una Mujer para Dos fue una de las tantas películas con insinuaciones sexuales que William H. Hays no toleraba. Hays fue el creador del código de ética dentro de Hollywood y evitó la distribución de muchas películas de contenido sexual, o referencias al respecto, obligando a varios directores y productores a cambiar diversos aspectos que no concordaran con su código. La película sería prohibida cortando así su distribución. A pesar de ello, su calidad no pasaría desapercibida, gracias a la gran demostración del toque Lubitsch dentro del cine.





El trío lo componen tres actores de muchísimo talento. Entre los caballeros se encuentra Fredric March. El joven actor ya había tocado la gloria con un Oscar y una nominación más. Su futuro estrellato estaría en las siguientes décadas en donde haría un sinnúmero de roles, ganándose el respeto de sus pares y de la empresa. El otro caballero es nada menos que el gran Gary Cooper. También joven y a las puertas de una gran carrera, Cooper comenzó desde muy joven en pequeñas partes de películas mudas, escalando paulatinamente a roles más importantes. Uno de sus primeros triunfos sería Morocco (1930) junto a Marlene Dietrich, y a partir de allí seguirían roles cada vez más impresionantes. La señorita responde al nombre de Miriam Hopkins. La actriz americana tenía un gran talento en comedia teniendo aires de seducción bastante llamativos, haciendo que la mayoría de sus producciones fueran censuradas. Su gran momento llegó bajo la dirección de Lubitsch con Un Ladrón en la Alcoba (1932) y seguiría teniendo gran aceptación de público y crítica por las siguientes dos décadas. Después de ello, su popularidad bajaría así como sus apariciones en pantalla, pero siempre sería recordada por su capacidad para las comedias inteligentes.





Ernst Lubitsch es uno de esos pocos directores con estilo propio. Al igual que Hitchcock con el crimen o Buñuel con el surrealismo, Lubitsch es un referente y especialista en su propio rango, en este caso,  la comedia. Su popular estilo lo hizo acreedor del adjetivo de “el toque Lubitsch”. Las comedias de Lubitsch se mueven dentro de las relaciones matrimoniales, los problemas de alcoba, la infidelidad y otros temas referentes. La genialidad de Lubitsch era tratar el tema como cualquier otro problema de índole lógico. Como si fuera un tratamiento que se le da a una circunstancia económica o social, Lubitsch no escatimaba en hacer pequeños sacrificios morales y tocar libremente la idea de la infidelidad como parte de la realización del amor, la libre sexualidad de la mujer o el hombre como el factor pasivo dentro del sexo. A pesar de lo riesgoso del tema, el director compensaba todos estas situaciones con un final adecuado, con un final en el cual no podía “asimilar” aquello que atentaba con su idea de amor o de la moral. Lubitsch era un genio en ese sentido, tomando grandes riesgos pero siempre teniendo en cuenta el entretenimiento como base de todo tipo de relación humana. Así dejaría una extensa serie de comedias insuperables y un legado hasta ahora no igualado.






Datos.

Título Original: Design for Living
Dirección: Ernst Lubitsch
Año: 1933
País: Estados Unidos
Intérpretes: Gary Cooper, Fredric March, Miriam Hopkins, Edward Everett Horton, Franklin Pangborn, Isabel Jewell, Jane Darwell, Wyndham Standing
Duración: 174 min.

jueves, 11 de junio de 2009


LA SOLEDAD DEL CORREDOR A DISTANCIA




Intro.

Imagina correr. Cierra tus ojos por un momento e imagina correr. Imagínate corriendo. Ahora trae a tu memoria todos aquellos pequeños detalles, como si fueses un niño tratando de formular un dibujo. Ahora llena los espacios y recuerda que sientes cuando corres. Latidos. Viento. Sudor. Calor. Lluvia. Frío. Movimiento. Rapidez. Cansancio. Inercia. Satisfacción. Inconsistencia. Lágrimas. Imaginación. Dolor. Inacción. Sensación. Un momento. Simplemente un momento. Un momento con muchos significados y ahora te entrego un significado más: escape. Ahora cierra tus ojos y corre.

Correr es un escape. Es huir, huir, huir. Es entender una realidad y darse cuenta que no es posible adaptarse a ella, que todo aquello que nos rodea no contiene identificación, no conlleva a la satisfacción. No hay significados que apoyen tu existencia. Es así, el momento más visceral de la juventud, cuando entienden que su edad no es tan importante y que su vitalidad carece de profundidad. Es así como se siente la soledad… la soledad de un hombre, la soledad de sus momentos… la soledad del corredor a distancia.






Cuerpo.

Escrita en 1959 por Alan Sillitoe, La Soledad del Corredor a Distancia fue adaptada al cine en 1962 con Tony Richardson en la dirección. Sillitoe sería parte en los años cincuenta de la llamada generación inglesa de los Angry Young Men. Dicha generación, donde también circularon los escritores John Osborne y John Braine, influenciarían decididamente sobre la generación de directores cinematográficos de los años sesenta para imprimir mucho de estos libros que retrataban la represión juvenil luchando contra el sistema político, judicial y laboral en el Reino Unido. Tony Richardson se formó rápidamente como parte de la nueva ola del cine británico y su firma se imprimió dentro de grandes producciones lanzando a futuros actores de gran nivel y calibrando con efectividad sus guiones. Richardson conseguiría grandes triunfos como director, llegando a ganar en 1964 el Oscar como mejor director y la mejor película por Tom Jones.





La Soledad del Corredor a Distancia configura la realidad de la juventud inglesa de esos años y su completo desentendimiento de la autoridad. Colin Smith (interpretado por Tom Courtenay) es el típico joven rebelde que niega todo tipo de autoridad y que no busca mayor progreso más que el vivir día a día con sus altos y bajos. Su actitud es la demostración de toda una generación en contra de lo establecido configurando la sociedad inglesa de la clase media, ese extraño sin sabor que nos deja estar entre no ser rico y sentirse más apegado a la pobreza. La película demuestra un signo generacional de la juventud: su actitud desafiante contra las generaciones anteriores y su poca perspectiva en cuanto a su condición humana. Los jóvenes no están siendo diferentes, simplemente están siguiendo un proceso histórico. Así como ellos, sus padres buscaron desafiar su tiempo y abrirse camino, la única diferencia son los límites impuestos. Tom Courtenay fue reconocido en los premios BAFTA como mejor promesa joven y destacaría durante los años sesenta en otras producciones como Billy Liar (John Schlesinger, 1963) y Dr. Zhivago (David Lean, 1965). Posteriormente su trabajo estaría más ligado al teatro, donde también tuvo representaciones aclamadas.





La Soledad del Corredor a Distancia se inscribe dentro de un peculiar movimiento a finales de los años cincuenta y comienzos de los sesenta en Inglaterra llamado Free Cinema, que buscaba mostrar el realismo de la juventud inglesa, sobretodo su rebeldía y cruda respuesta ante la autoridad. Influenciado por la nouvelle vague francesa, el movimiento también fue conocido como la Nueva Ola Británica, donde concurren diferentes directores de la talla de Lindsay Anderson, John Schlesinger, Tony Richardson, Jack Clayton, Karel Reisz, Bryan Forbes, entre otros. La mayoría de estas entregas se basaban en dramas que fueron conocidas como kitchen sink dramas, que literalmente se traduce como dramas de lavadero de cocina y que se caracterizan por centrarse en la vida de la clase trabajadora. Otro de los componentes importantes de este movimiento es el uso de locaciones reales y de actores no profesionales que vivían en estos lugares. Entre otras grandes obras dentro de esta temática encontramos Look Back in Anger (1958), Room at the Top (1959), A Taste of Honey (1961) y This Sporting Life (1963).







Datos.

Título Original: The Loneliness of the Long Distance Runner
Dirección: Tony Richardson
Año: 1962
País: Reino Unido
Intérpretes: Tom Courtenay, Michael Redgrave, Avis Bunnage, James Bolam, Alec McCowen, Joe Robinson, Dervis Ward, Topsy Jane, Julia Foster
Duración: 104 min.